Notre Dame, Musée de Louvre, Château de Versailles et Tour Eiffel

Continuando en donde me quedé con el relato de París, los últimos días ahí hicimos lo siguiente:

Cathédrale Notre Dame de Paris

A pesar de que ya habíamos visitado la Cathédrale Notre Dame de Paris, no habíamos entrado ni subido a las torres, por lo que aprovechamos un día para hacerlo. La colosal construcción que por fuera se puede apreciar, por dentro también conserva sus magnitudes y es mucho más grande y obscura que muchas de las catedrales que he visto en diferentes lugares. Lo primero que lamenté, precisamente por este hecho, fue el tener una cámara tan crappy y no contar con un buen flash (aunque procuro no usar este último en muchos lugares, a pesar de que esté permitido) ni con un buen zoom, pues la mayoría de fotos que tomamos dentro de la catedral están demasiado obscuras y se tiene que usar mucho la imaginación para saber de qué se trata. Aún así, no fue impedimento para que tratara de capturar los detalles internos y sobre todo sus bellísimos, hipnóticos y enormes vitrales que se pueden apreciar por todas partes. Me llamó mucho la atención el hecho de encontrarme dentro un altar a «La virgen de Guadalupe», la «patrona de México» (mía no, ¿eh? :P) dentro de Notre Dame pues no hay muchas «vírgenes» ahí, excepto unas dos o tres. Me quedé embelesado con los gigantescos candelabros y las pinturas que se pueden descubrir aquí y allá, en la obscuridad y por momentos imaginé a Armand escondido por ahí, sufriendo en silencio en la época en la que estuvo en Francia con su famoso Théâtre de vampires. Dentro de la sacristía (que se paga por entrar, bonita cosa), pudimos descubrir los «tesoros» de la iglesia; muchísimos de los cuales se perdieron durante la Revolución Francesa pero aún así, los que sobrevivieron no nos permiten olvidar el ostento que la iglesia católica siempre ha tenido, a pesar de que existan millones y millones de personas muriendo de hambre alrededor del mundo. Como sea, mi visita era exclusivamente en plan histórico y turístico, por lo que traté de dejar de lado cualquier opinión religiosa y continuar apreciando lo que veía.

Después de apreciar la parte de adentro de la catedral, hicimos cola para subir a las torres y mientras esperábamos a que a la siguiente «tanda» nos tocara entrar, un francés con una máscara horrible que bien podría recordar a Cuasimodo se aprovechaba de la gente que iba pasando, distraída observando la catedral, para tomarlos de la mano y cuando lo veían daban tremendos gritos y saltos que nos divertimos como enanos. Cuando finalmente subimos a la torre, pudimos apreciar una vista espectacular de París desde las alturas, pero evidentemente eso no es lo interesante de estar sobre Notre Dame, sino… ¡las gárgolas! Las famosísimas gárgolas que le han dado tanta fama y que algunas son verdaderamente tétricas, mientras que otras parece que en cualquier momento cobrarían vida. Traté de retratar tantas como me fue posible y dado que había mucha luz, en esta ocasión las fotos no fueron tan malas como las de dentro de la catedral. Por último subimos al obscuro campanario del cual aún evoco el peculiar olor a madera y que contiene una enorme campana la cual debió haber sonado bastante fuerte cuando la hubieran tocado. Bajamos del campanario y poco a poco nos alejamos de Notre Dame, despidiéndonos de este famosísimo e histórico monumento, no sin dedicarle algunas miradas de soslayo, mientras me alejaba, para ver si gracias a mi imaginación alguna gárgola cobraba vida, o si Cuasimodo aparecía en alguna torre para decirnos adiós, o más bien, hasta pronto.

Las fotos de Notre Dame las he puesto en una galería especial junto con las que habíamos tomado anteriormente, por lo que si vas a la galería ya habías visto algunas fotos, simplemente avanza de página y encontrarás las nuevas.

Fotos de la Cathédrale Notre Dame de Paris

Musée de Louvre

Al otro día decidimos levantarnos temprano y estar a primera hora en el Musée de Louvre para poder ver la mayor cantidad de cosas que nos interesaran. Claro está, ya estábamos preparados Ariel y yo para visitar solamente pequeñas partes del museo, pues es bien sabido que si alguien quisiera ver todas y cada una de las obras durante un minuto, tendría que emplear alrededor de ocho semanas para hacerlo lo cual da una idea de la inmensidad del lugar. No quisimos ir, como el 95% de los turistas hace, según información del mismo museo, directamente a ver a «La mona lisa», sino que decidimos dejarla para el postre y entrar a las áreas que más nos interesaban. Llegamos a las pirámides de cristal y bajamos hacia el museo. Nos apuramos a llegar al área de «Mesopotamia y culturas orientales» en donde pudimos ver obras de la interesantísima historia del nacimiento del hombre moderno, según los estudiosos, y cuna de las civilizaciones modernas. Pude ver el famosísimo «Código de Hammurabi» sobre el cual había leído hace tanto tiempo en la secundaria, así como también pudimos contemplar obras verdaderamente milenarias. Después de correr (no literalmente, claro está) y terminar en dicha área, pasamos al área de «Antigüedades griegas, etruscas y romanas» en donde pudimos realmente deleitarnos con las clásicas esculturas que, por más que las había visto en fotografías aquí y allá al contemplar su perfección «en vivo» no pude más que estremecerme. Por ahí vimos a Afrodita, también conocida como «La Venus de Milo» a la cual decenas de personas fotografiaban. Me causó gracia la reacción que tuvieron varias personas ante la escultura del «hermafrodita», algunos de sorpresa y otros de franca algarabía. Después de también volar (otra vez, no de manera literal :P) por esa área, pasamos a la tan esperada por nosotros área de «Egipto faraónico», y es que siempre me ha atraído en sobremanera la cultura egipcia y ahora pude apreciar muy de cerca centenares de objetos recuperados de hace miles y miles de años, y hacer un recorrido por toda la historia de Egipto, desde su fundación hasta su caída y sometimiento por parte de los griegos, y aún más. Ariel quedó fascinado con los sarcófagos que estaban ahí expuestos, y ¿cómo no estarlo? Había también momias de gatos, animales muy apreciados por esa cultura pero que a mí francamente me daban miedo. Pasamos algunas horas en esa área, hasta que la recorrimos por completo (claro está, sin poder ver todo lo que había, casi corriendo y sólo medio deteniéndonos en lo que nos llamaba más la atención para leer al respecto o escuchar la narración de la audioguía).

Ya era tarde y estábamos algo cansados, pero aún nos faltaba la parte más visitada del museo: Las pinturas renacentistas y ahí nos dirigimos. Pude contemplar, no son emocionarme, obras de Miguel Ángel, Caravaggio, Leonardo Da Vinci y un cúmulo de pintores italianos renacentistas. Algunas no las conocía; otras tenía muchas ganas de verlas y así, entre pintura y pintura llegamos al área especial en donde tienen «la cereza del helado»: La ultrafamosísima Gioconda, conocida como «La Mona Lisa» a la cual acertadamente describe la audioguía del museo como «probablemente la pintura más famosa del mundo». Fue interesante pararse ahí, en la nueva sala (la movieron de donde la tuvieron durante años) con sus miles de dispositivos de seguridad y una abarrotada audiencia, todos queriendo acercarse para contemplarla de cerca, de diversos ángulos y fotografiarla. Nos quedamos ahí un buen rato y me deleité con los comentarios de todo el mundo en los idiomas en que pude entender. Claro está, nunca faltaron los gringos pendejos (con perdón de los gringos que no lo son) que llegaron tres diferentes familias (sí, TRES) y todas hicieron exactamente el mismo comentario: «Ah, pensé que sería más grande». Claro está, en gringoria lo más grande es «lo mejor», pero eso es harina de otro costal y mejor no me desvío del tema. Ya era tarde y estábamos cansados después de estar aproximadamente 10 horas en el museo (fue un miércoles, si lo recuerdo bien, y ese día cierran mucho más tarde que lo habitual) pero aún así terminamos de recorrer el área renacentista para después irnos, no sin cierto dejo de tristeza, de este grandioso museo que algún día podré recorrer teniendo todo el tiempo que quisiera para hacerlo.

Otra vez, las fotos las junté con las que había tomado anteriormente de la parte de afuera del museo, por lo que si quieres ver las fotos de las obras deberás avanzar algunas páginas en la galería.

Fotos del Musée de Louvre

Château de Versailles

Al otro día decidimos ir a Versailles, en las afueras de París a conocer el lugar y sobre todo el famosísimo, megasuntuoso y extraordinario Château de Versailles. Tomamos un tren (RER) hacia las afueras de París y llegamos en unos 45 minutos. El día estaba nublado (a diferencia de tooodos los días anteriores, que estuvieron soleados y los pobres parisinos morían de calor, mientras que Ariel y yo estábamos muy a gusto) y amenazaba con llover, pero confiamos en que no nos mojaríamos (mucho). Caminamos pocas cuadras de la estación hasta el Palacio y empezamos a ver desde lejos que se trataba de una imponente construcción. Dicho palacio fue construído por mandato de Luis XIII, rey de Francia, e incluso lo habitó Luis XIV «El rey sol», el cual lujosamente lo adornó. Cuando hablo de suntuosidad y lujos no exagero. En mi vida jamás había visto habitaciones tan impresionantes, y eso que fueron destruídas en su mayoría por la revolución francesa y posteriormente las reconstruyeron para hacer el museo que ahora podemos visitar. Al ver tantos lujos fácilmente puedo imaginar cómo es que el pueblo francés se levantó, teniendo tanta hambre y viviendo en la miseria mientras que sus reyes vivían en lugares como Versalles… impensable para los tiempos modernos (¿o será que no lo es tanto? ¿hay, acaso, mucha diferencia ahora, con gente viviendo en extrema pobreza mientras otras personas viven en total opulencia?). Entramos primeramente a las «habitaciones reales» en donde pudimos ver las distintas cámaras que anteceden a la más importante: las habitaciones del rey, las cuales, dicho sea de paso, están decoradas con motivos dorados por doquier. Después de visitar las impresionantes habitaciones, pasamos por La galerie des Glaces, que desafortunadamente se encuentra en reparación por lo que sólo pudimos apreciar una parte de ésta. Visitamos las recámaras de la reina y del delfín (el príncipe de Francia) para posteriormente volver a salir e ir a otra ala del edificio, a Les Grands Appartements, en donde también contemplamos toda suerte de extravagantes objetos de decoración dentro de las habitaciones. Desde ahí pudimos apreciar la parte trasera del palacio, que es un gigantesco jardín que cuenta con dos lagos artificiales y cientos y cientos de metros de flores y árboles, hacia los cuales nos dirigimos al salir del Château. El día se ponía más y más gris, pero aún pude aprovechar par tomar varias fotos de los grandes jardines, incluyendo multicolores flores e insectos posados sobre ellas. Por un momento me sentí en Cuernavaca, en Francia :D. Continuamos recorriendo los jardines pero empezó a llover con fuerza y tuvimos que tomar un «trenecito» de regreso al palacio para emprender la huída hacia París, otra vez.

Fotos del Château de Versailles

Tour Eiffel

Al siguiente día, el último tristemente en París, decidimos aprovechar que a partir del 24 de junio comenzó la temporada de «Soldes» y en las tiendas de ropa se podían encontrar descuentos desde 10% hasta un extraordinario 80%, por lo que fuimos de compras y pudimos adquirir ropa interesante, dentro de nuestras posibilidades, tanto para nosotros como para los sobrinos ;). Ese día Patrick pudo comer con nosotros (los días anteriores no, porque trabajaba y Ariel y yo andábamos por París todo el día solos) y nos llevó a comer a un restaurante de italianos en donde probamos una milanesa realmente deliciosa. Continuamos posteriormente comprando y por la tarde fuimos hacia lo que todos los turistas que van a París hacen tarde o temprano: subir la Tour Eiffel. Decidimos ir por los escalones, ya que la fila para los elevadores era inmensa (¡huevones!) y además hay que vivir la experiencia completa de caminar para llegar hasta la segunda plataforma, al menos. A medida que ascendíamos podíamos contemplar otra vez una vista espectacular de París, pero esta vez de alturas mayores. Cuando llegamos hasta la segunda plataforma, había mucha gente esperando a subir a la punta, por lo que tuvimos que hacer una cola de aproximadamente 40 minutos, pero al mismo tiempo eso me permitió contemplar a los turistas y después de unos minutos se me ocurrió que, dentro de mí, a la «Torre Eiffel» le pondría «La Torre de Babel» tanto por la altura como por la cantidad de idiomas que la gente habla mientras la asciende. Hubo muchos idiomas que pude identificar y otros tantos que no tengo ni idea de qué era, pero había gente de todo el mundo unidos por una sola idea: llegar a la cima de París, a ese monumento mundialmente reconocido y disfrutar, aunque sea por momentos, de una vista fabulosa de una de las ciudades más atractivas del mundo. Cuando llegamos a la cima tuvimos un buen rato para contemplar el espectacular paisaje y entonces, ya habiendo conocido muchos de los lugares en París, pudimos identificar los lugares por donde estuvimos y volverlos a ver, desde un mismo lugar para de alguna manera despedirnos de ellos y darles un ¡hasta algún día otra vez!. Debo confesar que sí, sentí nostalgia de saber que al siguiente día abandonaríamos París, y aunque regresamos en otras dos ocasiones sólo fue «de entrada por salida» con rumbo a otros destinos.

Las fotos, como en las galerías anteriores, las junté junto con las del pique nique que tuvimos en la torre, por lo que las nuevas están al final de la galería.

Fotos de la Tour Eiffel

Aquí acaba la narración sobre nuestras aventuras en París. Al otro día emprendimos la marcha hacia otros nuevos y desconocidos países, pero eso lo relataré posteriormente ;).

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19 Respuestas

  1. Mercedes dice:

    Bueno,yo dejó este comentario por que me parecen muy chiquitas las fotos que ponen. Propongo que sean más grandes. 😀 😎 🙂 Chau Mercedes.

  2. Imoq dice:

    Mercedes:

    Las fotos son suficientemente grandes; sólo debes dar clic sobre ellas para ampliarlas. (Se amplían hasta 3 megapixeles).

    Saludos.

  3. Tabris dice:

    Mi viaje a París no fue tan lindo como el tuyo, pero en mi caso circunstancias personales y de pareja «jodieron» un poco esa experiencia… Ahora el recuerdo de París me molesta como una piedrita en el zapato…

    Saludos.

  4. Imoq dice:

    Tabris:

    Siento que tu experiencia no haya sido buena 🙁

    Afortunadamente, según lo que he leído, has tenido buenas experiencias en algunos otros viajes, ¿cierto? 🙂

    Saludos 😉

    Imoq.

  5. tabris dice:

    Bueno, sí, lo he pasado mejor en otros viajes… Y como es algo de lo que no me canso (cuando tengo dinero, lo cuál no sucede muy a menudo), eso hago.

    ¡¡Saludos!!

  6. carla dice:

    Hola, me dio mucha emociòn leer sobre tu viaje ya que recorde con noctalgia mi visista a ese lugar. Hace 1 mes que fui y todo es tal como lo dice, oscura la Notre dame, muy grande el luvre, mucha riqueza en versailles y muy romantica la torre eiffel. Yo fui con mi novio y fue un viaje maravilloso. Vivimos 7 meses en Niza y realmente hemos vuelto enamorados de francia.
    Saludos
    Carla

  7. Imoq dice:

    Carla:

    Me alegro que te la hayas pasado muy bien por allá también. Es realmente genial y se lo recomiendo a todos quienes tengan la oportunidad de hacerlo 🙂

  8. '? dice:

    no saben tomar fotos

  9. juanita dice:

    yo me lo pase de pu madre en paris . 20 dias buau pero fue un pok caro pero merecio la pena fuimos aorando poco a poco y al final vimos muchisimas cosas de paris no todas xk es imposible pero kasi todo.lo unik k me dio mas miedo al principio fue el avion me daba la sensacion de miedo por si kaia. pero no callo.me lo pase genial kiero repetir.posdata k la gente k valla a francia valla a disney es una pasada :-O

  10. Anónimo dice:

    hola a todos solo quiero molestar

  11. Anónimo dice:

    hola yo no quiero molestar solo un saludo para todos jejej

  12. spain dice:

    :-DE VENIDO A ESta pagina xk estoy aciend un trbajo de frances! 😆

  13. raul dice:

    esta pagina esta tope xula 😎

  14. jeime karina camaron bautista dice:

    es muy chevere conocer este lgar ya que esoy aprendiendo su lenguaje

  15. anonimo dice:

    poner mas informacion de paris del arco del triunfo…

  16. Anónimo dice:

    😛 Hey mola la página, jejeje 😀

  17. no registrado dice:

    yo kiero saber como es lenguaje k utilizan en parís x favor escríbame el k fue a parís que escriba un párrafo 😕

  18. :evil: dice:

    todos son unos gollorneas malparidos 😆 👿 😀 😕 😎 :-O 👿 🙁 😆 😡 😛 😳 🙄 🙂 😉

  19. nicolas dice:

    oiga 👿 deje de ser tan grosero mal educado

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