Un año en chilangolandia

Durante la semana pasada cumplí ni más ni menos que un año completo de vivir y trabajar acá en la Ciudad de México. Sí… ¡un año!. Yo apenas y puedo creerlo. ¿Cómo pasó el tiempo tan rápidamente?. ¿Y cómo es que mis quejas de lo poco que me gusta la ciudad han disminuido de manera drástica? ¿Será que ya me estoy acostumbrando a estar aquí? :boah: 😥

En cualquier caso, no puedo estar más agradecido con la empresa en donde laboro por haber confiado en mí, haberme contratado y apoyado durante todo este tiempo. Aquí no hay más que puras satisfacciones y la cosa se va poniendo mejor día con día.

Con respecto a la ciudad, pues bueno, trato de disfrutarla (¡de verdad lo intento!) pero en realidad el sentimiento de rechazo que tengo arraigado puede más y al final de cuentas termino simplemente tolerándola. Es una ciudad maravillosa, ¡tiene tantas cosas qué ofrecer a la gente! pero simplemente no es un lugar al que yo siento que pertenezca, en donde me sienta a gusto de habitar. Varios de mis mejores amigos están aquí y creo que eso es lo que más me ha ayudado a sobrellevar la vida en esta gigantesca y peculiar urbe pero de todas maneras siempre he extrañado y extrañaré mi querida Cuernavaca.

Lo he escrito antes y lo repito ahora: no tengo idea de cuánto tiempo más vaya a estar aquí pero sí quiero pensar que no serán muchos años. Ya veremos qué me depara el destino. Un año… ¡qué aguante el mío! :P.