Caso «payaso asesino de McDonald’s» (Ronald McDonald): Estupidez y estupidez.

Si este mensaje lo hubiera puesto el día de ayer, cuando hice mi broma del día de los inocentes habría parecido que es broma; sin embargo, no lo es.

Mi hermano comentó durante la cena de navidad, cuando en algún momento de la conversación salió a colación este tema, que hablar de esta colosal estupidez era alimentar el chisme y hacerlo más grande. Probablemente tenga razón y entonces tal vez estoy pecando contra lo que tanto odio, pero de verdad, ¡ya no aguanto tanto chisme alrededor! Todo el mundo habla de eso, mucha gente está traumada y lo peor del caso: la mayoría de la gente lo cree. Así que, con perdón de mi hermano y de quien crea, como yo, que esto es una soberana estupidez, deberé hablar del asunto para ver si algún perdido cae por aquí y se da cuenta de lo absurdo de la situación. Empezaré, pues.

Los «hechos»: Hace un par de semanas Yair, un chico que está haciendo su servicio social aquí en la oficina, le contó a su jefa (Paty) la siguiente historia, que inmediatamente fue compartida con el resto de la oficina: Resulta que dos empleados de Mc Donald’s de Plan de Ayala en Cuernavaca salieron de trabajar «tarde», estaban cansados y se sentaron en una banca que está afuera del restaurante. Uno de ellos, supuestamente, dijo «Estoy muy cansado» y entonces sucedió lo que dio origen a todo este chisme. Supuestamente el payaso Ronald cobró «vida», se volteó y dijo «Yo también» lo que provocó que le diera un infarto a este empleado y muriera. Por si fuera poco, al otro empleado le impactó tanto que está en el hospital «en coma» (sabrá Dios a causa de qué, es lo que dice el chisme). El meollo del asunto, y lo que comentaba Yair, es que todos estos hechos fueron grabados en un vídeo y que por eso «hay pruebas de que sí sucedió» (Claro, como en toda leyenda urbana, le pasó al amigo del amigo del primo de la abuelita pero nadie sabe, nadie supo).

El chisme: Pues bien, a partir de esto se disparó el chismerío aquí en Cuernavaca. A casi donde quiera que vayas hay gente hablando del hecho, pero no hablando en el mismo tono de enojo qu estoy empleando en este momento, ni siquiera en tono de burla o ya de perdida de incredulidad. ¡No! ¡Están hablando de esto en tono «serio«!. La gente CREE que esto sucedió y habla de ello como si fuera una historia real, asustándose y mencionándola con temor de que algo les vaya a suceder, que vaya a salir «el maldito payaso asesino del Madona (sic) que los va a matar».

Las consecuencias: Al parecer el chisme se propagó aún más porque alguien mencionó en el programa de Otro Rollo con Adal Ramones el «incidente», y entonces el chisme se propagó a nivel nacional. Casualmente en algunas ocasiones he visto que Adal Ramones sale en publicidad de la competencia más fuerte de Mc Donald’s en Cuernavaca, la cual es Burger King ¿Coincidencia? No lo creo. (Y no, no me malinterpreten, yo odio la comida de Mc Roña’s. Considero que es chatarra de lo peor, pero ese no es el punto del mensaje). Curiosamente he visto cuando he pasado fuera de Mc Donald’s que ya casi no tiene gente comprando hamburguesas, y eso que es época de vacaciones. ¿Otra coincidencia? Más bien, ¡qué ardid publicitario tan bueno!. Todo el mundo habla de un supuesto vídeo que se grabó pero que, ciertamente, nadie ha visto. También quieren oficializar el asunto diciendo que «existe demanda judicial (?) al respecto», aunque nadie ha mostrado un número de expediente.

La conclusión: Si eres de los que creen que esto sucedió, y aún después de leer esto así expuesto, de manera plana y natural aún crees que sucedió, por favor, ¡replantea tu sistema de credibilidad!. No niego la existencia (o no) de los fenómenos «sobrenaturales» pero sólo te pido un poquito de comprensión respecto a este caso en particular. Está claro que todo ha sido un excelente ardid anti-publicitario, no sé de quién, pero todo apunta que de la competencia de esta cadena de restaurantes. Razona bien las cosas y verás el nivel de estupidez que representa este hecho.

Epílogo: Lo que me llevó a escribir esta nota fue que otro compañero de la oficina me envió este enlace de un diario ecuatoriano en donde hablan del «caso McDonald’s» como una noticia aparte pero que alguien de Cuernavaca encontró y se puso a comentar sobre «el payaso asesino». Curiosamente me pude dar cuenta que el chisme ya se extendió con las variantes de «payaso violador de mujeres», «payaso come niños» (¡en serio!) y otros más. Si te quieres divertir un rato, por favor, lee la noticia y lee los comentarios que la gente ha puesto al respecto. Te sorprenderás realmente del nivel de estupidez humana.

Ojalá que este pequeño mensaje pueda lograr su cometido, que es tratar de hacer recapacitar a más de uno al respecto.