Non-stop party

Creo que eso de no trabajar se me da muy bien. Anoche estaba haciendo un recuento y, aparentemente, desde el sábado pasado he estado en lo que bien podría ser una interminable fiesta. ¿Lo mejor de todo? Es que no parece que acabará pronto ;).

El sábado, como es bien sabido, tuvimos el pachangón (vodka) y el domingo rematamos con el brindis (vino espumoso) antes de que nuestros amigos se regresaran a la Ciudad de México.

El lunes no hubo alcohol pero sí un agradabilísimo encuentro con Lalo Irabien y Manuel quienes vinieron a visitarnos pues no habían podido venir a la fiesta pero ya teníamos muchas ganas de vernos. Fuimos a comer a «Don Pollo» porque ése fue uno de los primeros temas que platiqué con Lalo hace muchos meses, cuando aún vivía en España en «Wicked Little Town» y me decía que extrañaba mucho comer en «el restaurante de pollos que está por una Comercial Mexicana». Pues bien, ahí fuimos. Por desgracia se tuvieron que regresar a la Ciudad de México (¿por qué todo mundo va para allá? :-x) pero la pasamos genial ese día, realmente fue bueno poder estar juntos durante algunas horas. Lalo también lo mencionó en su blog ;).

El martes pintaba para ser un día tranquilo y en general lo fue. Me llamaron para una entrevista de trabajo de un proyecto que se antoja muy interesante, pero que debo definir varias cosas antes de tomar cualquier decisión al respecto. Por la tarde llegaron un par de amigos de Cuautla, Jonathan y Javier y quienes salieron un rato con Ariel (el lugar a donde fueron es digno de contar, pero que lo describa Ariel. Yo sólo mencionaré que durante el rato que estuvieron ahí hubo violencia, policía, un gordote presuntamente drogado, muchas chicas histéricas gritando asustadas y gases lacrimógenos). Yo me quedé en casa jugando Kingdom Hearts II (ya pasé Agrabah :D) pero cuando regresaron andaban entonados y como había sobrado una bebida preparada de vodka por ahí, y además tomaban tequila, no dije que no y yo también le entré :P.

El miércoles Ariel tenía una cita en el sur de la Ciudad de México a las doce del día, por lo que lo llevé. Pensamos que nos íbamos a regresar temprano pero se nos ocurrió que ya que estábamos allá podíamos quedarnos a comer, o lo que fuera. Terminamos en Italianni’s de Zona Rosa y afortunadamente, a pesar de que era el día de las madres no había tantas de éstas :P. De ahí nos estuvimos poniendo de acuerdo con los amigos para ir al cine o algo. Decidimos que lo haríamos en Plaza Universidad pero cuando llegamos allá vimos que no había nada qué ver, por lo que mejor optamos por ir a Neve & Gelato de La Condesa por deliciosos postres :D. Como aún era temprano cuando salimos de ahí, fuimos a un barecillo que estaba cerca junto con Jorge y Felipe, Ricardo, Alfredo, Iván Salgado y «Totó», a quien no conocíamos pero que nos cayó muy bien. Esa noche hubo más vodka y regresamos a la casa a Cuernavaca pasada la media noche.

Ayer jueves tuve varias cosas qué hacer por la mañana, incluyendo el comprar un monitor, bocinas y una impresora para mis papás. Ya teníamos planeada una comida con la gente de mi ex-oficina (bueno, puros cuates, obviamente ni la bruja mala del oeste ni sus secuaces fueron requeridos) y como andaba con mi mamá me acompañó junto con Ariel. Comimos con ellos, platicamos, me reí mucho (por fuera y por dentro :P) de saber cómo están las cosas en la oficina sin nosotros y sólo puedo atinar a pensar que seguirán sufriendo, pero c’est la vie. Después de la comida llevamos a mi mamá a su casa, en Tetecala al sur del estado, pasando por Xochitepec, Alpuyeca (parada obligada a las nieves de coco), Coatetelco, Mazatepec y ya. De regreso íbamos a ir a Cuautla con Johnatan y Javier por lo que nos dijeron que había una ruta más corta (¡pasando cerca de Tetelpa, qué emoción y qué miedo!) para prácticamente atravesar todo el estado sin pasar por Cuernavaca. La tomamos, yendo de Alpuyeca hacia Xoxocotla, Zacatepec (¡ahí! ¡ahí pasamos cerca de Tetelpa!), Tlaltizapán, Ticumán, Yautepec y posteriormente llegando a Cuautla. ¿No les encantan los nombres de los municipios, pueblos y «ciudades» de Morelos? :). En Cuautla no hay mucho qué ver, pero nos llevaron a un lugar que CREO que se llama «Beer Factory» en donde probé lo que nunca pensé que haría: ¡cerveza con sabores!. Sé que puede sonar como algo asqueroso (a mí me pareció cuando me lo describieron) pero ya tomándolo cambia totalmente la idea. No sé, será que a mí no me gusta la cerveza y entonces lo que me encantó de la bebida es que disimula muy bien el sabor a ésta. Probé una de uva y otra de cereza con mora, aunque la que me encantó fue la de «fresa-kiwi» que sólo me dieron a probar. De ahí fuimos a otro lugar llamado «La Resa-K» (qué originales :P) y pasado de las diez de la noche regresamos a Cuernavaca. Juro que estaba en condiciones de manejar, a pesar del vodka del último lugar :P.

Hoy, bueno, ya es «beviernes» y el fin de semana promete mucho, incluyendo un «acapulcazo» ;), aunque en el transcurso del día afinaremos detalles. ¡Ah! Eso sí. A pesar de que no ha parado la pachanga durante casi una semana he ido todos los días al gym, ¿eh? Así que se compensa todo con el ejercicio, ¿verdad? :P. Ya veremos, ya veremos ;). Mientras tanto, ¡no quiero que la fiesta termine!, aunque sospecho que la próxima semana la realidad será apabullante y deberé ponerme serio otra vez para ver lo del trabajo y demás cosas. Igual trataré de que sea bueno mientras dure ;).